José
Rivera
Tonalá,
13 de noviembre de 2012, Personas de la tercera edad y con capacidades
diferentes, temen por su integridad, ya que las banquetas son utilizadas como
estacionamientos, de motocicletas, autos, o para la exhibición de mercancías,
en el peor de lo escenarios están en muy malas condiciones originado por el
abandono, o porque hacen rampas sin ninguna especificación de por lo que los
peatones se ven en la necesidad de caminar por la calle para poder transitar,
asi lo dio a conocer Ruth Jiménez de Lucio, persona con capacidades diferentes.
Quien
además dijo estas personas especiales tienen que pasar por estas calles
diariamente, por lo que aseguran se
enfrentan con la misma riesgosa situación, ya que por ser calles muy estrechas, los automóviles se estacionan
de manera inadecuada y ocupan en su mayoría la totalidad de la banqueta.
Por otra parte los comerciantes de la zona
afirman que en estas calles se cuenta con un tránsito bastante fluido, lo que
aumenta significativamente el riesgo debido a la falta de movilidad que tienen
este tipo de personas.
Todo lo
anterior pone en riesgo la integridad de estas personitas que tienen que
descender de la banqueta para poder caminar en el arroyo vehicular, ya que
cuando los vehículos pasan por dicha arteria la mayoría de sus conductores no
minoran su velocidad, ni le dan la preferencia a los peatones para pasar pese a
que en muchas de las ocasiones el peatón vaya en el paso peatonal.
Incluso
señalaron que ya se dio una ocasión en que una persona de la tercera edad fue
aventada por un vehículo imprudente frente a la escuela primaria José María
Cáceres, ya que en este punto las banquetas son muy altas sin contemplar la
integridad de las personas.
Por
desgracia al ser una calle que se ubica dentro del primer cuadro de la ciudad
muy próxima al mercado, no hay suficientes agentes de tránsito ni semáforos,
para regular el flujo de estos automóviles, y es cuando la gente queda desprotegida,
concluyo.
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