José Rivera
Tonalá, 21 de noviembre de 2011, Padres de familia como Francisco López de Lucio, señalaron que faltó coordinación para la realización del desfile del 20 de noviembre, que dejó como saldo, niños y jóvenes con desmayo por hipoglucemia, deshidratación quemaduras de Primer grado, entre otras. Pues muchos de los niños vienen de las comunidades y no les dieron alimentos a esa hora.
Quien además dijo en el marco del desfile del 101 aniversario de la revolución Mexicana, lamentó que no se giraran instrucciones por parte de las autoridades encargados de la seguridad y vigilancia. Pues no había quien dotara de agua a los participantes para prehidratarse. Ya que los niños quedaron varados por espacio de seis horas expuestos directamente al sol.
“Hubo problemas de organización, queriendo funcionar cada quien por su lado, pues obvio que no se podía, se dan cuenta después de lo ocurrido, pues los niños fueron citados a las ocho de la mañana y después de las dos de la tarde algunos profesores detectaron un foco rojo, por lo que sus niños estaba empezando a caer, por eso exigen una mejor atención por parte del comité organizador de la mano de Protección Civil y Seguridad Pública”.
Reconocieron que los padres de familia como la señora Ana Bertha Prado Peña, perdieron la calma, al ver la cara de sus niños como estaban pálidos con sudoración fría, signos característicos de desmayo, lo que obligo a tener que tomar las medidas necesarias para poder retirar a sus hijos a una zona de sombra, pero muchos niños estaba solos, pues ninguno de sus padres se encontraba ahí, por lo que continuaban cayendo, ya que el ultimo contingente llego al parque central Esperanza a eso de las cuatro de la tarde. Bajo los rayos directos del sol.
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