José Rivera
Tonalá, 23 de junio, Una gran cantidad de agua se estanca cada vez que llueve en las calles de acceso y frente a la escuela telesecundaria Jaime Torres Bodet, numero 418, ubicada en la colonia san Ramón, de este municipio.
Los padres de familia denunciaron que se han cansado de solicitar se apoye con material balastre o grava engreña, mínimo, a las autoridades del Ayuntamiento, pero estas han hecho caso omiso.
Al parecer ninguna autoridad, desde regidores y directores de departamentos, no les importa la suerte que pueda correr la salud de cientos de niños, jóvenes y adultos que estudian en dicho centro en horarios matutino.
Expresaron que cuando cae un pequeño aguacero, los niños tienen que caminar descalzos en el agua, con el riesgo de contraer enfermedades, solo con el fin de no mojar los zapatos de acudir al otro día al centro educativo.
Dicen que ese charco de agua pone en riesgo la salud de los niños del centro educativo cada vez que caen las lluvias, provocándoles enfermedades de la piel, fiebre y fuertes resfriados.
Los padres de familia esperan que las autoridades municipales actúen cuanto antes, y ordenen la calzadura que se requiere para eliminar ese foco de contaminación.
Corresponsales de diferentes medios realizaron un reportaje similar a este el año pasado, y desde la fecha hasta este momento no se ha acercado ni siquiera la presidenta de la comisión de educación o el titular de obras publicas a dar la cara y resolver este problema.
“Sabemos que la campaña pasó, pero aun esperamos que no tenga que morir ningún niño para que la autoridad municipal mande a resolver el problema de encharcamiento en la escuela telesecundaria”, indicaron los afectados
Tonalá, 23 de junio, Una gran cantidad de agua se estanca cada vez que llueve en las calles de acceso y frente a la escuela telesecundaria Jaime Torres Bodet, numero 418, ubicada en la colonia san Ramón, de este municipio.
Los padres de familia denunciaron que se han cansado de solicitar se apoye con material balastre o grava engreña, mínimo, a las autoridades del Ayuntamiento, pero estas han hecho caso omiso.
Al parecer ninguna autoridad, desde regidores y directores de departamentos, no les importa la suerte que pueda correr la salud de cientos de niños, jóvenes y adultos que estudian en dicho centro en horarios matutino.
Expresaron que cuando cae un pequeño aguacero, los niños tienen que caminar descalzos en el agua, con el riesgo de contraer enfermedades, solo con el fin de no mojar los zapatos de acudir al otro día al centro educativo.
Dicen que ese charco de agua pone en riesgo la salud de los niños del centro educativo cada vez que caen las lluvias, provocándoles enfermedades de la piel, fiebre y fuertes resfriados.
Los padres de familia esperan que las autoridades municipales actúen cuanto antes, y ordenen la calzadura que se requiere para eliminar ese foco de contaminación.
Corresponsales de diferentes medios realizaron un reportaje similar a este el año pasado, y desde la fecha hasta este momento no se ha acercado ni siquiera la presidenta de la comisión de educación o el titular de obras publicas a dar la cara y resolver este problema.
“Sabemos que la campaña pasó, pero aun esperamos que no tenga que morir ningún niño para que la autoridad municipal mande a resolver el problema de encharcamiento en la escuela telesecundaria”, indicaron los afectados
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