Proliferan los fraudes con ganar presuntos premios
Pablo Villareal
1 de agosto de 2008, La necesidad de mucha gente y el deseo de salir de pobres de la manera más fácil, ha llevado a muchos a caer en manos de vivales, que los envuelven como corderitos para luego dejarlos con un palmo de narices en espera de que les cumplan, en esta ciudad esta de moda estos tipos de ilícitos.
Por razones obvias se omite los nombres, a petición de los agraviados que han caído en el juego de estafadores profesionales, que luego de lograr su objetivo se esfuman como por arte de magia y a otros simplemente ni los conocen, porque la operación la hacen vía telefónica, con lo que queda demostrado que todavía existen personas ingenuas o ambiciosas, según el caso.
Araceli, una de las afectadas, explicó que recibió apenas anteayer una llamada telefónica, en donde le comunicaban que se había sacado un carro en un sorteo, pero que tenía que comprar 10 tarjetas de 200 pesos cada una y después hablar a un teléfono que le indicarían para que les proporcionara los códigos.
"Yo, pensando que era mi día de suerte, saqué con mi tarjeta del banco dos mil pesos y compré las tarjetas, luego hablé al número que me dieron y les proporcioné el código, pero nunca me puse a pensar que yo no le había preguntado a la persona que me habló quién me iba a entregar el carro y el teléfono que me dieron se me olvidó, porque no lo anoté de lo emocionada que estaba".
"El caso es que me entró la duda y lo comenté con una amiga, ésta me dijo que ya ha ella le habían hablado pero como a un amigo lo timaron con ese cuento mejor les colgó y no hizo nada, con esto no me queda más que resignarme a perder mis dos mil pesos".
De éstos hay varios casos parecidos, lo malo es que la mayoría como no conocen a quien les habla, no denuncian, o simplemente por no hacer el ridículo ante los demás mejor se callan.
También existen aquí personas entre ellos ganaderos, que fueron defraudadas por un vivales que, según les dijo, pertenecía a una empresa que vende vehículos americanos a crédito y con el cuento de que les vendería carros en perfectas condiciones, les enseñó un catálogo con fotos de estos.
El único requisito que les pidió fue que tenían que depositar el 10 por ciento del costo del vehículo a una cuenta, cuyo número les proporcionó a los posibles compradores que cayeron en el cuento. Incluso el gerente de una empresa argumentó que depositó una cantidad, porque quería un buen vehículo, otros fueron depositando de acuerdo a sus posibilidades económicas.
Para ello el individuo mencionado les dio un número de celular para que le hablaran por si alguien más quería comprar uno, pero cuando le hablaron éste les dijo que le tenían que depositar otra cantidad, porque tenía que hacer algunos trámites y vuelven a caer.
El caso es que ya van varios meses y el vehículo madrina donde iban a llegar todos los vehículos no aparece, y del tipo que presuntamente los engañó ni sus luces, porque el número que les dio parece que fue cancelado.
Otros casos son los que están sufriendo otras personas a las que tienen engañadas los de una agrupación que presuntamente les iba a gestionar unos créditos, para que llevaran a cabo unos proyectos en esta ciudad, todo esto acontece en este municipio y nadie ha hecho nada para frenar, los que mas padecen esto son los que tienen familias en los Estados Unidos.
Pablo Villareal
1 de agosto de 2008, La necesidad de mucha gente y el deseo de salir de pobres de la manera más fácil, ha llevado a muchos a caer en manos de vivales, que los envuelven como corderitos para luego dejarlos con un palmo de narices en espera de que les cumplan, en esta ciudad esta de moda estos tipos de ilícitos.
Por razones obvias se omite los nombres, a petición de los agraviados que han caído en el juego de estafadores profesionales, que luego de lograr su objetivo se esfuman como por arte de magia y a otros simplemente ni los conocen, porque la operación la hacen vía telefónica, con lo que queda demostrado que todavía existen personas ingenuas o ambiciosas, según el caso.
Araceli, una de las afectadas, explicó que recibió apenas anteayer una llamada telefónica, en donde le comunicaban que se había sacado un carro en un sorteo, pero que tenía que comprar 10 tarjetas de 200 pesos cada una y después hablar a un teléfono que le indicarían para que les proporcionara los códigos.
"Yo, pensando que era mi día de suerte, saqué con mi tarjeta del banco dos mil pesos y compré las tarjetas, luego hablé al número que me dieron y les proporcioné el código, pero nunca me puse a pensar que yo no le había preguntado a la persona que me habló quién me iba a entregar el carro y el teléfono que me dieron se me olvidó, porque no lo anoté de lo emocionada que estaba".
"El caso es que me entró la duda y lo comenté con una amiga, ésta me dijo que ya ha ella le habían hablado pero como a un amigo lo timaron con ese cuento mejor les colgó y no hizo nada, con esto no me queda más que resignarme a perder mis dos mil pesos".
De éstos hay varios casos parecidos, lo malo es que la mayoría como no conocen a quien les habla, no denuncian, o simplemente por no hacer el ridículo ante los demás mejor se callan.
También existen aquí personas entre ellos ganaderos, que fueron defraudadas por un vivales que, según les dijo, pertenecía a una empresa que vende vehículos americanos a crédito y con el cuento de que les vendería carros en perfectas condiciones, les enseñó un catálogo con fotos de estos.
El único requisito que les pidió fue que tenían que depositar el 10 por ciento del costo del vehículo a una cuenta, cuyo número les proporcionó a los posibles compradores que cayeron en el cuento. Incluso el gerente de una empresa argumentó que depositó una cantidad, porque quería un buen vehículo, otros fueron depositando de acuerdo a sus posibilidades económicas.
Para ello el individuo mencionado les dio un número de celular para que le hablaran por si alguien más quería comprar uno, pero cuando le hablaron éste les dijo que le tenían que depositar otra cantidad, porque tenía que hacer algunos trámites y vuelven a caer.
El caso es que ya van varios meses y el vehículo madrina donde iban a llegar todos los vehículos no aparece, y del tipo que presuntamente los engañó ni sus luces, porque el número que les dio parece que fue cancelado.
Otros casos son los que están sufriendo otras personas a las que tienen engañadas los de una agrupación que presuntamente les iba a gestionar unos créditos, para que llevaran a cabo unos proyectos en esta ciudad, todo esto acontece en este municipio y nadie ha hecho nada para frenar, los que mas padecen esto son los que tienen familias en los Estados Unidos.
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